La verdad es que encontramos información sobre el entorno que nos ha inducido a pensar que valía la pena ir y la verdad no nos ha decepcionado en absoluto.
En la Comunidad Valenciana, hasta la fecha hay declarados, mediante diferentes acuerdos del Consell, 52 Parajes Naturales Municipales. De ellos solo cuatro se encuentran en la comarca de la Costera, y uno es ésta “Selva de Estubeny”
El paraje fue declarado Paraje natural Municipal por Acuerdo del Consell de la Generalitat de fecha 2 de abril de 2004. El Paraje Natural Municipal “La Cabrentà”, con una superficie de 1,41 ha, se localiza en el término municipal de Estubeny en la provincia de Valencia. Para llegar allí vamos en dirección a la población de Estubeny y sin entrar al pueblo lo rodeamos por su parte izquierda según se baja, allí se encuentra un cartel informativo sobre la zona. Si dejamos el coche allí, podremos descender en dirección hacia el río y a mano izquierda encontraremos el desvío que nos indica la dirección a la Cabrentà.
La Cabrentá o Selva de Estubeny es un bosque húmedo de incalculable valor botánico, faunístico y geológico que conoció por última vez la actividad humana al acabar la guerra civil. Esto y la suma de años y un microclima especialmente húmedo han propiciado que hoy en este lugar podamos apreciar uno de los pocos ejemplares de selva mediterránea.
Este pequeño paraje destaca principalmente por la gran relevancia de la flora botánica que atesora. La vegetación presente en la zona, es de gran importancia y de escasa distribución en la Comunidad Valenciana, contiene los bosquetes de laurel con almez, en los que se intercalan otras especies como el aladierno, la hiedra o la zarzaparrilla, formando una agrupación característica de un clima muy semejante al subtropical. Esta asociación (laurel y almez) que se observa de forma muy dispersa y en la mayoría de casos cultivada, se encuentra en la Cabrentà de forma natural, siendo por ello necesaria su conservación y propagación. Es un paraje enclavado entre elevaciones montañosas y cerca del cauce del rio, una zona umbría de elevada humedad.
Junto a estas especies aparece también el granado, de gran valor paisajístico para este paraje, debido a la variación en la coloración que aporta a lo largo del año, pasando de un color rojizo anaranjado en otoño al rojo vivo que destilan sus grandes flores durante el mes de junio. El algarrobo y la higuera junto con algún resto de palmito son también habituales del lugar. Por último aparece un estrato lianoide, asociado a paredes, muros y troncos de árboles. En él, aparecen con gran cobertura plantas trepadoras como la rubia o la hiedra.
De otro lado, la alternancia de grandes valles y picos ha provocado el aislamiento de plantas cuya capacidad de dispersión no alcanza grandes distancias. De ese modo, en las comunidades más abundantes, como son los matorrales bajos, se concentran un alto número de endemismos pertenecientes al género Thymus (tomillos y mejoranas), Satureja (ajedreas) o Sideritis (rabogatos). Además de su importancia botánica es destacable la singularidad de sus afloramientos litológicos de travertinos y tobas, con estalactitas, estalagmitas y columnas.
He leído en alguna página que el recorrido debe de hacerse con cuidado y no salirse de los caminos que han sido marcados ya que hay grietas de considerable profundidad y es potencialmente peligroso para los niños.
La acción del agua subterránea ha formado quebradas, paredes rojizas, túneles, grietas profundas, estalactitas, estalagmitas, columnas y banderas. El microclima existente ha hecho que se pueda apreciar uno de los pocos ejemplares de selva mediterránea. Posee una vegetación característica de climas tropicales o subtropicales, aunque también podemos contemplar el alionero, garrofero, laurel y pino carrasco. En cuanto a la fauna este paraje es excepcional para escuchar innumerables especies de aves que acuden atraídas por los variados frutos del bosque.
La ruta que nosotros hemos seguido no la plasmamos en un mapa como en otras ocasiones porque es de escaso recorrido y no tiene casi perdida. Dejamos el coche en las coordenadas de GPS N 39’01638 y W 0’62475.
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Si descendemos de Estubeny en dirección al río rodeando la población por la parte izquierda, luego podemos encontrar a mano izquierda el cartel que nos indica la ruta. La seguimos hasta encontrar la Font del tío Marcelino.
Seguimos descendiendo por el sendero vallado por un bosque de árboles secos hasta llegar a una pequeña carretera que cogemos en dirección a la derecha. Si hay algo que llama poderosamente la atención es el canto de los pájaros y el tintineo del agua que nos acompaña en todo momento.
Siguiendo por esa carretera encontramos un desvío hacia la izquierda que nos lleva hacia la Fuente del Tío Blanco. Al regresar a la carretera, en breves instantes encontramos otro pequeño sendero que se desvía hacia la derecha se asciende. Lo seguimos y disfrutamos de una maravillosa naturaleza que nos acompaña en todo momento. Tras ascender llegamos al punto de partida, cerca de la Font del tío Marcelino. Por ello decidimos volver a bajar por donde habíamos subido ya que nos había gustado mucho el paseo.
Volviendo al camino asfaltado y siempre disfrutando del canto de los pájaros (es impresionante, al menos en primavera), seguimos hasta encontrar un gran cartel que nos indica que estamos en la Cabrentá, si nos introducimos por esa intrincada red de pequeños caminos, estaremos en el interior del paraje, es momento de disfrutarlo, sus grietas, su vegetación, las estalactitas, sus senderos, creedme un lugar increíble y en nuestra comarca.
Como ruta de senderismo no tiene un gran recorrido pero aún así es digno de ver. Lo que sí recomendaría es que todos aquellos que lo visiten sean respetuosos con el medio ambiente y que tratemos de no romper el equilibrio que necesita un paraje como este. Lo ideal sería no cortar las flores, romper plantas ni estropear las rocas, una estalactita necesita cientos de años para producirse y un golpe la estropearía en unos segundos. No solo es el momento de verlo, es muy importante que nuestros hijos y nuestros nietos también puedan disfrutarlo.
Para aquellos que quieran completar una ruta, desde aquí se puede seguir el sendero GR-237 hasta Sellent que tiene unos 10 km de ida y vuelta.
Para más información se pueden visitar las siguientes páginas.
http://www.metode.cat/index.php?option=com_content&task=view§ionid=&id=199&Itemid=
http://les3cabretes.com/?q=node/77
http://ceavantlacostera.blogspot.com/2010/02/la-selva-destubeny-o-la-cabrenta.html
http://pacocarrera.blogspot.com/2009/01/la-cabrent-en-estubeny.html
http://www.cma.gva.es/intro.htm
hemos estado esta tarde en esta bonito enclave. es una pasada poder caminar por dentro de las rocas . muy bonito
ResponderEliminarMe alegro de que te guste, a mí personalmente me sorprendió esa vegetación y paisaje en la comarca. Es diferente al resto de la comarca.
ResponderEliminarUn saludo.
Is there a place where we can park our camper?
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